martes, 15 de noviembre de 2011

Romancín de Medianoche - II

No seas distante, corazón mío, no lo seas,
ni mi silencio creas que es el frío olvido.
El claro amor se fortalece en la ausencia
mas siendo así, sí, aunque no lo veas,
abatido estoy sin ti y quedo vencido.


Que faltándome tú, no hallo sino pesar,
que faltándome tú, oscuros son los días;
sabrás, hermosa mía, lo he de contar,
que hasta el aire me susurra cómo suspiras
y mis labios sangran si no te pueden besar.